Tras su reciente visita a la región del Maule, la gerenta de Innovación, Jocelyn Olivari, se refirió al trabajo que ha realizado la gerencia que lidera en la región, asegurando que Corfo busca potenciar el desarrollo del ecosistema de innovación.

-¿De qué manera su visita refuerza el compromiso de Corfo con la innovación en el sector agrícola de la región, y cómo esperan que esto impacte a las empresas locales?
 
La región del Maule tiene un potencial tremendo para realizar innovación en el sector agrícola, alimentos y vitivinícola. Este proceso que lleva a cabo la región conversa directamente con las misiones de Desarrollo Productivo Sostenible que el Gobierno de Chile, desde Corfo y otras agencias públicas, busca impulsar, en particular en las áreas de Resiliencia a la crisis climática, Descarbonización Justa y Transformación Productiva.
 
En ese sentido, mi visita en el Maule sólo ratifica el interés de Corfo por acompañar a la región en abordar sus desafíos productivos a través de la innovación y el emprendimiento, para lo cual potenciar una mayor vinculación entre los actores del ecosistema de innovación se vuelve clave. Y el impacto ya lo vemos mediante, por ejemplo, la empresa SynergiaBIO, que acabamos de visitar, quienes realizan I+D en biotecnología aplicada al sector agrícola. Ellos acaban de adjudicarse financiamiento a través de nuestro programa Crea y Valida Sostenible, para desarrollar en Maule una nueva variedad de tunas sin semilla, de alta eficiencia hídrica. Desarrollos como los de SynergiaBIO pueden captar el interés de la industria como solución agrícola en regiones desértica. Esto es clave: somos el único país de América Latina con “estrés hídrico extremo”, según Naciones Unidas, una problemática que mantendrá este nivel al menos hasta 2050, y donde lugares como Maule pueden convertirse en reales laboratorios naturales para pilotear soluciones innovadoras.
 
- Dado el desafío de aumentar la producción de alimentos y el rol clave de la región de Maule, ¿qué estrategias considera necesarias para mejorar la formación de capital humano y transformar la matriz productiva hacia un modelo de mayor valor agregado?
 
En el mundo debemos aumentar en un 70% la producción de alimentos al año 2050. Las últimas investigaciones muestran que hoy 735 millones de personas padecen hambre, en comparación con 613 millones en 2019. Chile, y especialmente la región de Maule, puede jugar un rol importante como principal productora de fruta fresca del país. Sin embargo, la región enfrenta desafíos como baja formación de capital humano especializado y una alta concentración de empresas agropecuarias pequeñas y de bajo valor agregado.
 
Desde la Gerencia de Innovación de Corfo, tenemos herramientas para abordar estas brechas e instalar capacidades para que las empresas puedan innovar. El programa Capital Humano para la Innovación, por ejemplo, busca contribuir justamente al fortalecimiento de las capacidades I+D+i empresarial mediante la inserción de talento altamente calificado en las empresas, desde técnicos profesionales hasta doctores en distintas áreas del conocimiento, con el objetivo de abordar desafíos de I+D.

Otra estrategia relevante que puede adoptar la región es profundizar la colaboración entre la academia y la empresa. Existe una importante masa crítica de universidades complejas y centros de investigación que realizan I+D de manera sistemática, las cuales buscan colaborar de manera permanente con el mundo empresarial para abordar desafíos productivos. Otra herramienta de Corfo que propicia la colaboración es nuestro instrumento Crea y Valida, subsidio que financia proyectos de innovación con componente de I+D realizado por una empresa en colaboración con alguna organización generadora de conocimiento. Incluso, este instrumento lo usamos para apoyar proyectos de innovación colaborativos con empresas extranjeras en el marco de la Red Eureka.
 
- Maule es la principal región productora de vinos del país. ¿Hay proyectos en I+D recientes que recibieron financiamiento de Corfo?
Maule tiene un potencial tremendo para agregar valor a través de la innovación en industrias relevantes para Chile como es la producción de vinos. Instrumentos Corfo para estimular proyectos de innovación con alto nivel de sofisticación en esta industria están disponibles, como el Crea y Valida, Innova Alta Tecnología y la Ley de Incentivo Tributario a la I+D.
 
Un ejemplo de proyecto de innovación cofinanciado por Corfo lo realiza la empresa IoTera, quienes se adjudicaron financiamiento cercano a $119 millones para desarrollar en Maule el proyecto FarmQC, una herramienta basada en machine learning e IoT para generar algoritmos predictivos para detectar anomalías en el proceso de control de calidad en la cadena de certificación de viñas orgánicas. 
 
Otro ejemplo que me gustaría relevar es el de la Viña Concha y Toro, quienes, gracias a un proyecto colaborativo con una empresa extranjera en el marco de la Red Eureka, se adjudicó un subsidio de más de $290 millones para producir un bioestimulante líquido rico en microorganismos benéficos y nutrientes, para ser aplicado vía fertirriego en suelos de viñedos, evitando el uso de fertilizantes tradicionales y fungicidas químicos.
 
-Se suele pensar que estos cambios tecnológicos están reservados para las grandes empresas. ¿Mito o realidad?

La innovación no está reservada ni para las grandes empresas, ni para el mundo de los startups y del emprendimiento. Tampoco es un hobbie de países o regiones más ricas, más bien es la razón por la cual estas naciones lograron desarrollarse.

La innovación también ocurre en las pymes. De hecho, en el país, según datos de la Encuesta Nacional de Innovación (2019-2020), hay unas 179.000 pymes activas, y de ellas un 13% innovan activamente, unas 23.000. Para el caso de la región del Maule, existe una importante masa crítica de empresas pymes innovadoras, totalizando potencialmente cerca de 800 empresas.

-¿Qué muestra el panorama regional de las mujeres que lideran empresas y que están realizando innovación e incorporando capital humano especializado?

Necesitamos más mujeres en todas las actividades productivas del país. No solo por un asunto moral de propiciar la igualdad de género, sino porque existe evidencia robusta de que mayor diversidad en las organizaciones generará mayor creatividad, lo que afectará positivamente los procesos de innovación que se realizan. En otras palabras, productivamente, es deseable que exista mayor inclusión de mujeres en la industria, en particular en empresas con foco en realizar innovación de manera sistemática.

Corfo, desde la Gerencia de Innovación, impulsa mediante acción afirmativa la inclusión de mujeres en proyectos de innovación: entregamos un 10% de cofinanciamiento adicional a empresas lideradas por mujeres. Además, hemos realizado convocatorias con foco exclusivo en empresas con liderazgo femenino, como es el caso del instrumento Innova Región Mujer.

En cuanto a los datos, desde los proyectos de innovación financiados por Corfo a partir del 2019, se observa que, en la región del Maule, el 34,2% de proyectos adjudicados son liderados por mujeres, 4 puntos porcentuales por sobre el promedio nacional. Este hecho muestra un panorama auspicioso en la región, pero con muchos desafíos por abordar para avanzar en esta materia.