Chile es el país más austral del planeta donde se cultiva el arroz, principalmente en las regiones del Maule y Ñuble, durante los meses de septiembre y noviembre. 

En el marco de los desafíos en materia de sustentabilidad en la producción de arroz a nivel nacional, específicamente en Ñuble, surge el Programa Territorial Integrado (PTI) de Desarrollo productivo sustentable de arroz, iniciativa apoyada por Corfo y ejecutada por Codesser, que busca posicionar a esta región como pilar fundamental en Chile de la producción sostenible de este alimento.
 
El programa, que está en su primer año de ejecución, actualmente desarrolla un plan de trabajo orientado a abordar estos desafíos y mejorar la gestión de los recursos en torno a la producción de arroz, en un contexto en el que el clima y las precipitaciones son cruciales y representan una importante restricción para este cultivo.
 
“En los últimos años las lluvias y disponibilidad de agua para riego ha disminuido entre un 20 y un 40%, debido a un evento climático que los expertos denominan ‘mega sequía’. Esto ha generado que los agricultores deban disminuir la superficie sembrada y ha instalado la necesidad de adquirir nuevos conocimientos y tecnologías para realizar una gestión más eficiente del recurso hídrico”, explica el gestor del PTI, Rodrigo Arroyo.
Según comenta el profesional, este cultivo requiere de mucha agua para su producción, situación que puede amenazar su continuidad. “En esa línea, las principales innovaciones e inversiones que se requieren tienen que ver con la generación y aplicación de tecnologías de riego y estudiar la posibilidad de incorporar en el territorio nuevas variedades de arroz que necesiten menor cantidad de agua”.
 
La directora regional de Corfo en Ñuble, Macarena Dávila, señala que este programa entrega la posibilidad de establecer relaciones virtuosas entre instituciones públicas, académicas y privadas, para abordar las brechas existentes en esta materia y generar soluciones factibles de implementar a corto y mediano plazo. “Estamos trabajando junto al equipo del PTI en abordar las problemáticas del sector arrocero con un enfoque de sostenibilidad. Por una parte, queremos apoyar a este grupo de productores y empresarios para que puedan mantener esta actividad económica, que además es tradicional de este territorio, y por otra, queremos que estos negocios seas competitivos y crezcan en línea con las demandas medioambientales. Para eso trabajamos con una gobernanza integrada por actores relevantes para este sector, que tienen mucho que aportar en esta materia”.
 
Características y desafíos al sur del mundo
 
Carla Cordero, mejoradora genética de arroz de INIA Quilamapu, comenta que en este territorio se dan las condiciones climáticas apropiadas para la producción de arroz del tipo japónico, que solo se produce en el 15 o 10% del mundo. “Este arroz se caracteriza por no presentar plagas ni enfermedades, por lo que no requiere de aplicación de fungicidas ni pesticidas, lo que lo hace un arroz de muy buena calidad”, señala la investigadora.
 
Rodrigo Arroyo indica que actualmente, diversas instituciones que forman parte de la gobernanza del PTI de Arroz, entre ellos INIA Quilamapu, están gestando iniciativas y esfuerzos para profundizar los conocimientos en torno a la producción de arroz, y de esta manera hacerla más sustentable. “Para esto también es necesario capacitar a los productores de Ñuble y generar una mayor eficiencia y rentabilidad en torno a este producto”, agrega.
 
En esta línea, el programa además contrató el servicio de la empresa Smarthydro, que desarrolla herramientas tecnológicas para la gestión del recurso hídrico, para trabajar con productores del sector San Carlos-Niquén. “Nuestra empresa busca identificar dificultades asociadas a la gestión del agua en general y en esta zona hemos encontrado algunos problemas de revestimiento y algo de falta de información y conocimiento respecto de los caudales. Actualmente estamos trabajando en medición de la huella hídrica de algunos productores y analizando cómo avanzar desde esos resultados”, explica Diego Mardones, socio fundador y director general de Smarrthydro.
 
Rubén Gallegos, asesor técnico del PTI, comenta que para los agricultores de la zona es importante contar con información que les permita tomar mejores decisiones, como, por ejemplo, conocer la cantidad de agua disponible para planificar la superficie sobre la cual se va sembrar, el tiempo de siembra y los diversos insumos que van a utilizar. “En las actividades que hemos realizado últimamente con el programa hemos podido ver ensayos de siembras de cultivos de arroz por sistema por goteos, algo que era impensado. Pasar de la inundación permanente a un riego por goteo es un gran avance. La disminución de la disponibilidad hídrica nos está llevando a pensar en estos sistemas en los que debemos aumentar la eficiencia con que regamos el cultivo. Tenemos que innovar, tenemos que modernizarnos, hacernos más competitivos, para que el arroz se quede en la zona”, concluye.