A través de charlas y reuniones se dio a conocer este concepto, que propone una nueva y eficiente forma de visualizar y ejecutar la edificación.

Una charla a estudiantes de Inacap, un taller a directores y docentes de carreras relacionadas a la construcción y una reunión con representantes del mundo público; MOP, MINVU, Servicio de Salud de Ñuble y la Cámara Chilena de la Construcción, fueron las actividades contempladas en el marco de la visita de Carolina Briones, coordinadora Sector privado y Capital humano del Planbim, iniciativa del Comité de Trasformación Digital de Corfo.

“La visita de PlanBim de Corfo responde a una estrategia desarrollada por nuestra Corporación, para trabajar estos contenidos en las mallas curriculares de las instituciones de educación superior, que tienen carreras que se vinculan con el mundo de la construcción y, además, instalar en los servicios públicos y autoridades el concepto y los beneficios que tiene diseñar y construir con esta metodología”, indicó el director regional de Corfo, Daniel Sepúlveda.

En ese contexto, se llevó a cabo un taller dirigido a directores y académicos de instituciones de educación superior de Ñuble, en la que participaron representantes de los institutos Inacap, Santo Tomás y Diego Portales, y del Tecnológico de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, sede Chillán, en el que se analizó cómo incorporar BIM, en las actuales mallas curriculares, de las carreras relacionadas al área.

Según explicó la coordinadora, Carolina Briones, la metodología BIM (Building Information Modeling), tiene por objetivo incrementar la productividad y sustentabilidad – social, económica y ambiental – de la industria de la construcción, mediante la incorporación de procesos, técnicas de trabajo y tecnologías de información y comunicaciones que promuevan su modernización, a lo largo de todo el ciclo de vida de las obras.

“En el caso de ustedes, en Ñuble, por ejemplo, que van a tener un nuevo hospital, lo ideal sería dejar de lado la planificación y diseño de los proyectos en base a papel y hacerlo sobre la base de gemelos virtuales, que contienen una base de datos de la geometría de la construcción, pero también de su eficiencia energética y costos. Esta información no sólo permite planificar, sino que también simular cómo se va a comportar el edificio, cuánto va a gastar, etc.”, señaló la experta.

La información obtenida, a través de la utilización de distintos softwares que trabajan con la metodología BIM, queda en la nube, lo que facilita la administración de los recursos y una mejor planificación de los tiempos. “Estos datos permiten optimizar el diseño y a futuro operar y mantener los proyectos en base a esos modelos tridimensionales, de una forma mucho más eficiente. Ese es el gran avance que sugiere esta metodología. El desafío está en preparar al capital humano de la industria para ese cambio”, sentenció Briones.