Se trata de fuentes patrimoniales e históricas, que datan del año 1924, que documentan procesos históricos y cotidianos asociados a la Empresa Nacional del Carbón en la región de Biobío.

En una ceremonia realizada en Santiago, y conectados vía streaming con la región de Biobío y el resto del país, Corfo firmó el acta que traspasa, oficialmente, el Archivo de la Empresa Nacional del Carbón, Enacar, al Archivo Nacional, para su resguardo y conservación
 
Declarado Monumento Histórico Nacional en octubre del 2021, el archivo alberga 1.090 metros lineales en soporte papel con las fichas de exmineros y trabajadores de Lota, Lebu, Schwager, Pilpilco, Trongol, Colico y Victoria. Además, contiene planos y croquis de minas y pirquenes; protocolos de acuerdos entre la empresa y los trabajadores; informes de gestión, estados contables y financieros; entre otros. Este conjunto documental se mantendrá en la localidad de Lota, bajo el resguardo de un equipo de archivistas y conservadoras que ha trabajado desde el 2019 en su organización y preservación.

“Enacar forma parte de la historia de Corfo y, por lo tanto, estamos muy contentos de que este trabajo colaborativo permita entregar estos documentos restaurados y conservados. Las comunidades podrán contar con un archivo que resguarda la historia de la empresa y el registro de las actividades de la minería del carbón, accediendo a la memoria de generaciones que vivieron de la extracción del mineral en la región del Biobío”, señaló el Gerente de Desarrollo Territorial de Corfo, Claudio Maggi.

Además de su relevancia patrimonial, el rescate de este archivo es de mucha utilidad para para los ex mineros y sus familias pues les permite obtener certificados que son prioritarios para recibir algunos beneficios acordados tras el cierre de Enacar en 1997.  Es por ello que los primeros esfuerzos del equipo de archivistas y conservadoras fue digitalizar los expedientes personales.
 
“Este archivo representa la memoria de las personas y cuando la memoria es de una comunidad, finalmente es de todos nosotros, por eso es tan importante el trabajo que ha realizado el equipo de archivistas en Lota. Esta documentación se está digitalizando, así que además investigadores de otros lugares, que no son de Biobío, también podrán tener acceso”, comentó la directora (s) de Archivos Nacionales, Emma de Ramón.
 
La recuperación de los expedientes nace en 2019, tras un diagnóstico realizado por el Archivo Nacional que releva la necesidad de implementar los procesos de control físico, conservación y organización documental. De este modo, durante la primera fase del proyecto se desarrolló el inventario de 7.436 unidades documentales, distribuidas en los inmuebles que se albergan en la Casa Oficina y el Edificio Búnker, en la localidad de Lota.
 
“Estoy muy emocionada y agradecida porque esta ha sido una cadena de voluntades y compromisos. Esto como comunidad nos tiene mucho más entusiasmados y comprometidos para lograr nuestro objetivo: que Lota sea Patrimonio de la Humanidad”, señaló Elizabeth Aguilera, presidenta de la Mesa Ciudadana de Patrimonio, Cultura y Turismo de Lota.