Generar lazos comerciales entre empresas de ambos países, fue el objetivo de la reunión entre más de 100 pymes nacionales con la delegación del gobierno alemán a cargo del programa Partnering in Business with Germany (PBG), iniciativa ejecutada por Corfo, e impulsada por los gobiernos de Alemania y Chile.

Uwe Becher, socio y representante de Conoscope, entidad responsable de hacer match para impulsar estas alianzas, señaló que “Chile es un mercado relevante en sectores clave para la economía global como son el hidrógeno verde, los derivados del hidrógeno, el litio, el cobre y otros minerales”.

Destacó que nuestro país es un buen proveedor de productos fáciles de suministrar, como los digitales. “Esto siempre es una oportunidad para empresas. Chile en sí es un país atractivo en temas de economía o de comercio”.

A nivel latinoamericano el PBG, que lleva cerca de seis años operando, solo se encuentra vigente en México y Chile. En este sentido, Becher explica que las pymes nacionales que han sido beneficiadas con este programa no necesitan tanto esfuerzo para abrir puertas ya que son atractivas en sí. “Sobresalen en aspectos como la creatividad, tanto en el sector de la Información y Tecnología de Comercio como en videojuegos o aplicaciones. Creo que la cultura latinoamericana trae ventajas para las startups, porque destacan en temas donde la creatividad es un factor de éxito”, señala.

Según Becher, Chile es un mercado pequeño “donde la relación esfuerzo y probabilidad de que una puerta se abra y, que detrás haya un negocio interesante, es mucho mayor, porque son círculos pequeños. Es una cultura con mucha influencia europea, y eso nos hace sentir menos diferentes.Y como en negocios la confianza es el factor esencial, nos resulta más fácil”.

¿Y dónde están las diferencias? 

Nosotros preferimos como respuesta un no, y claro, no nos sentimos ofendidos para nada. En cambio, el chileno es indirecto, le cuesta decir no.  Aunque creo que la excepción somos nosotros y esa es una gran ventaja nuestra, porque te ahorras mucho tiempo. 
Por último, destaca que los participantes nacionales del programa son muy serios. “Eso es muy positivo porque no tienes que esperar muchas sorpresas. En los negocios nadie las busca”. 

 Por último ¿qué recomendarías tú a las pymes chilenas para internacionalizarse? 

Una recomendación bien universal, y refiriéndome a la gestión, es que los que suelen ganar son los más ágiles, no necesariamente los que tienen el mejor producto o el mejor precio, sino los más ágiles. Y un factor decisivo de éxito son los recursos que uno tiene, los recursos en tiempo, personal y dinero. 
Si una pyme, igual que una alemana, no dispone de suficientes recursos para llegar a la línea final, hay que pensar dos veces, y a lo mejor no invertir en algo que no puedas terminar. Hay que capitalizarte mucho más de lo necesario. Lo que también recomendamos a muchas pymes alemanas es que si son demasiado pequeñas piensen en fusionarse con empresas amigas.